Lo sabemos todos, menos los encargados de legislar: todo
valor es creado por el trabajo humano; todo valor pertenece a quien lo crea con
su trabajo.
En 2024 compartimos este pequeño planeta 8.060.000.000 de congéneres. Para 2023, la
fuerza laboral mundial (personas empleadas o buscando trabajo) era de 3.627
millones de trabajadores. Conjuntamente
creamos un Producto Interno Bruto
Global de 103.000.000.000 de dólares. Parecería suficiente para todos, pero no. Unos
3.300 millones de habitantes del globo, casi la mitad de todos, y cifra que se aproxima también a la de la fuerza laboral, padecen
inseguridad alimentaria. Asimismo 2.000 millones no tienen acceso al agua potable, 46% de la población mundial sobrevive con menos de $5.50 al
día. La distribución del fruto del trabajo no remunera mejor a quienes
más se esfuerzan en crearlo.
Para explicarlo citemos a Carlos Marx, cuya doctrina por cierto es
acogida por los estatutos del PSUV: el
capital tiende a concentrarse en un número cada vez menor de manos.
Quien dude de ello, consulte el portal Oxfam. Éste le informará
que el 1% de la población mundial, que
hasta hace poco acaparaba 50% de la riqueza del planeta, superó su marca: “Desde 2020, con la pandemia y la crisis del coste de la
vida, el 1 % más rico acaparó 26 billones de dólares (el 63 % de la nueva riqueza
generada), mientras que tan solo 16 billones de dólares (el 37 %) llegaban al
resto de la población mundial. Por cada dólar de nueva riqueza global que
percibe una persona perteneciente al 90 % más pobre de la humanidad, un
milmillonario se embolsa 1,7 millones de dólares. La
fortuna de los milmillonarios aumenta en 2.700 millones de dólares cada día,
mientras que los salarios de al menos 1.700 millones de trabajadoras y
trabajadores, más que la población de India, crecen por debajo de lo que sube
la inflación”.(https://www.oxfam.org/es/notas-prensa/el-1-mas-rico-acumula-casi-el-doble-de-riqueza-que-el-resto-de-la-poblacion-mundial-en).
Enternece tanto sacrificio de los ricos. Quizá nos consuele
saber que poco después, ya el 10% de la
población acapara el 82% de toda la
riqueza mundial, y que el 50% más pobre posee
menos del 1% de ésta (itci.org/es/1-posee-45-de-toda-la-riqueza-personal-global-10-posee-82-los-50-mas-pobres-poseen-menos-de-1/?utm_source=copylink&utm_medium=browser).
La fórmula para tal inaudita hiperconcentración es muy sencilla: no pagar impuestos. Los
multimillonarios hacen a los políticos, y los políticos a los multimillonarios,
hasta que los multimillonarios son políticos y los políticos multimillonarios.
Trump inauguró su primera presidencia en 2017 con la Tax Cuts and Jobs Act, que
disminuyó impuestos para los grandes
capitales, y abre el segundo
mandato con una oleada de perdones de
deudas impositivas para ricos y super ricos,
una reducción de impuestos
calculada en 5 billones de dólares y autorizaciones para contraer más deuda por 5,7 billones. En
compensación, sube los aranceles, que deberán pagar los sufridos trabajadores
en forma de sobreprecios.
En el mundo desarrollado hacia
1970 las grandes fortunas tributaban
hasta 70% del ingreso; hoy apenas 22%, menos que un oficinista promedio, cuando
no esconden las ganancias en Paraísos Fiscales. El multimillonario Trump
declaró no haber ganado un solo dólar en 2023. Informa Oxfam que “Elon Musk,
uno de los hombres más ricos del mundo, pagó un tipo impositivo real de alrededor del 3 % entre 2014 y 2018. Sin
embargo, Aber Christine, vendedora de harina de Uganda, paga en impuestos el 40
% de lo que logra facturar, ganando apenas 80 dólares al mes. Por cada dólar recaudado en
ingresos fiscales en el mundo, únicamente cuatro centavos proceden de gravar la
riqueza”. (https://oxfamilibrary.openrepository.com/bitstream/handle/10546/621477/bp-survival-of-the-richest-160123-es.pdf).
En Venezuela no pagan
impuestos los súbditos y empresas de una
treintena de países privilegiados con los Infames Tratados contra la Doble
Tributación (muchos de ellos, los mismos que nos bloquean y roban activos en el
exterior). Pueden ser exonerados de todo tipo de impuesto y favorecidos con
construcción gratuita de infraestructuras
e incluso aporte de capitales las empresas y empresarios extranjeros a los cuales
se entreguen Zonas Económicas Especiales con potencialidad geográfica
para conexiones terrestres, acuáticas, fluviales, lacustres o aéreas; importantes recursos naturales; condiciones
para la integración de procesos productivos; estructuras industriales e
infraestructura económica y de servicios. No lo digo yo, lo dice la Ley
respectiva (G.O. 6710, Extraordinario). Tampoco cancelan impuestos los
beneficiarios de los intereses devengados por la demoledora Deuda Pública.
Y ya que hablamos de ello, pesa sobre nuestro mundo una
Deuda Pública Global con monto de 318 billones de dólares para 2024, siete
billones más que el año anterior (para
los anglosajones, un billón es mil millones de dólares). Parece que los
productivos trabajadores (pues somos nosotros quienes en última instancia
pagamos siempre estos desastres) debemos algo más del 333% de todo lo que
producimos en un año.
Se podría formular una Ley de Malthus de la Avaricia en
virtud de la cual el producto del trabajo crece sólo en proporción aritmética,
y la deuda que lo pecha se incrementa en proporción geométrica. Según el CADTM (Comité para la Anulación de la
Deuda Ilegítima) ello lleva a la conclusión inevitable de que la deuda es
inmoral, ilegal, e impagable. Sin
embargo, no hay preocupación más prioritaria para los gobiernos que contraer
cada vez más nueva deuda, pagarla a costa del hambre, miseria y carencias de
los propios pueblos, y eventualmente del autosuicidio de las autoridades que la
contraen y cancelan.
Es oportuno añadir a estas reflexiones de Primero de Mayo la
inminente suplantación en nuestros puestos de trabajo por mecanismos
informáticos. Según Goldman Sachs, 300 millones de empleos serían desplazados
por IA para 2030. De acuerdo con Statista, 46% de los trabajos de oficina o
administrativos tendrían tal destino; según McKinsey, estaría condenado a él un
70% del total de la fuerza de trabajo (https://litslink.com/blog/how-many-jobs-will-ai-take-over-the-statistics#:~:text=25%25%20of%20routine%20tasks%20are,due%20to%20AI%20(Statista).
Construimos un mundo, y con él los mecanismos que nos harán
irrelevantes. Creamos una civilización que hace técnicamente posible eliminar
el trabajo alienado y proporcionar a todos
bienestar y ocio creativo, y en su lugar tenemos un infierno que nos despoja
en beneficio del 1%. Arriba, parias de la tierra, o bajo ella seremos
sepultados.
TEXTO/FOTOS: LUIS BRITTO
No hay comentarios:
Publicar un comentario